El representante de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia, Pablo Paredes, expresó su preocupación por los recientes casos de suicidio en niños y adolescentes, hechos que han generado conmoción en la población.
“Lamentablemente hemos registrado decesos de adolescentes y de niños por razones de suicidio. Es altamente preocupante porque está ligado a la salud emocional de la niñez y adolescencia”, manifestó.
Paredes remarcó que los padres de familia son los principales y únicos garantes de la integridad de los menores, por lo que hizo un llamado a mantener un diálogo más cercano con sus hijos, a ser más afectivos y a escucharlos con atención.
“Cuando llegamos a estos desenlaces trágicos, son consecuencia de un largo trance de depresión, ansiedad y abandono emocional. Esto es prevenible desde el acercamiento y la búsqueda de ayuda”, señaló.
En ese contexto, informó que la institución implementó un programa de fortalecimiento familiar, al que pueden acudir las familias que atraviesan situaciones de crisis.
Asimismo, pidió a los padres estar atentos a las señales de alerta, como el “cutting” (autolesiones), el aislamiento, cambios de comportamiento o alteraciones en los hábitos alimenticios, ya que estos son indicadores de que los menores podrían estar atravesando un problema emocional serio.
“La prevención comienza en casa, con la cercanía, el diálogo y la búsqueda oportuna de apoyo profesional”, concluyó Paredes