En un caso que ha generado controversia y críticas, el juez Roger Salvatierra dejó en libertad a Rony Suárez, ex esposo de la presentadora de televisión Desirée Durán, a pesar de las pruebas presentadas en su contra por violencia familiar. La audiencia cautelar, que se instaló este jueves tras cuatro intentos fallidos, no resultó favorable para Durán, quien ha denunciado a Suárez por violencia doméstica.
Desirée Durán, visiblemente afectada, lamentó la decisión judicial y expresó su frustración por no encontrar justicia. «Lo único que quiero es sacar a mis hijos del país», declaró Durán, reiterando su deseo de comenzar una nueva vida lejos de la violencia. «Me amedrenta con quitarme a mis hijos, los manipula con regalos ostentosos», añadió, describiendo el temor constante en el que vive.
Durán anunció que apelará la decisión del juez Salvatierra, buscando que se revoque la libertad de su ex esposo y se haga justicia en su caso. «Voy a hacer lo que sea necesario dentro del orden para que se haga justicia», afirmó.
El caso de Desirée Durán ha puesto de manifiesto la problemática de la violencia familiar en Bolivia y la necesidad de una justicia más efectiva y sensible ante estos casos. La decisión del juez Salvatierra ha generado dudas sobre la valoración de las pruebas presentadas y la protección de las víctimas.